Friday, October 18, 2013
Hablando del machismo
Si lees el
listado de la ilustración adjunta, te darás cuenta de lo poco que se ha
avanzado en la erradicación del machismo. Es una pena que en pleno siglo XXI
todavía ciertas actitudes que degradan a la mujer sigan latentes en esta parte
del mundo, que va desde el insulto en plena calle hasta prejuzgarla si comete
un acto “inmoral”
Tanto mujeres
como hombre merecen respeto y no ser etiquetados por el falso sentido de
superioridad que ofrece el machismo. Una mujer tiene las mismas oportunidades
que el hombre de realizar un trabajo con igual sueldo, de forjar su vida sin
ser tildado ni ridiculizado. La mujer y el hombre tienen el potestad de
expresar sus emociones y no ser blanco de burlas por demostrarlo. Una mujer tiene
el mismo derecho de llevar una vida sexual como bien le parezca con uno o más
hombres sin ser señalada como una lacra, de determinar si desea o no un
embarazo y no porque lo ordene la sociedad.
Por consiguiente el enunciado anterior debe
ser interpretado de este modo:
Zorro: Héroe
justiciero.
Zorra: Heroína
astuta.
Perro: Mejor
amigo del hombre
Perra: Mejor
amiga de la mujer
Aventurero:
Osado, valiente, arriesgado.
Aventurera: Osada,
valiente, arriesgada.
Cualquier:
Anónimo.
Cualquiera:
Anónima.
Fulano: Hombre
al azar.
Fulana: Mujer al
azar.
Callejero: De la
calle, urbano.
Callejera: De la
calle, urbana.
Hombrezuelo:
Hombrecillo, mínimo, pequeño.
Mujerzuela: mujercilla,
mínima, pequeña.
Hombre de la
vida: Hombre de gran experiencia.
Mujer de la
vida: Mujer de gran experiencia.
Hombre público:
Personaje prominente, funcionario público.
Mujer pública: Personaje
prominente, funcionaria pública.
Puto: Hombre que
tiene sexo por dinero.
Puta: Mujer que tiene sexo por dinero.
(Pd: me disculpo por las malas palabras. No es mi estilo usarlas, pero esta vez se debió recurrirlas)
Sobre el Mundial (El absurdo fútbol)
Alguien dijo una
vez: “el fútbol es el opio del pueblo”, y es verdad. Las cosas que se pueden
hacer y no hacer, de decir e incluso de agredir al otro en nombre de su
majestad el fútbol. Dos equipos dos tiempos de 45 minutos (y 15 extras, según
el caso) son los ingredientes para que la mayoría de personas se queden
inmovilizadas como zombies y peor aun
cuando se trata de la madre de todos los campeonatos, me refiero al susodicho
Mundial.
El mundial. La
mayoría desconoce, o prefiere desconocer que el máximo torneo es manejada por
la todopoderosa FIFA, ello implica dinero por millones repartidos en
publicidad, mercancía y corrupción que solo muy pocos pueden palpar ese dinero.
Un ejemplo: las autoridades de Brasil han autorizado el desalojo de las zonas
de miseria conocidas como favelas, a fin de crear espació turísticos, o simplemente
para esconder la pobreza al igual que los botaderos de basura. Los pobres debe
ser escondidos y negarles el paso durante el desarrollo del torneo, porque
“afean” el ritmo cosmopolita de la ciudad. El Mundial no es más que un gran
negocio disfrazado de un falso idealismo de hermandad, un espacio donde cada país
representado por un equipo mira por sobre el hombro al que proviene de un
territorio que no está a su nivel.
Pero el punto
medular de todo esto es que países que todavía no alcanzan el desarrollo,
gastan recursos y hacen todo el esfuerzo para obtener un sitio dentro del
torneo cada cuatro años. Es indignante cómo un país con retraso económico y
social se prostituye generando una
ilusión tan corriente, como si llegar a un mundial se convirtiera en la
solución de los problemas de un territorio.
Yo pregunto,
¿Cómo un país con altos niveles de machismo, desigualdad de género, injusticia
social, ineficiente, carente de convicción puede aspirar a un Mundial?
Honestamente, ¿Acaso un país cuyos habitantes tiene serios problemas de
entendimiento, respeto, disciplina, subyugados a la cultura del alcohol,
sexismo y corrupción pueda llegar a aspirar un sitio en ese torneo? Un país que
carece de convicción, respeto y dignidad no merece ir a un Mundial. Por eso
este país no lo merece, hasta que se resuelvan los problemas de fondo.
Thursday, October 10, 2013
Acércate
Ven y toma mano, no me sueltes.
que el destino te ha obligado a
lucir;
sé tú misma cuando estás a mi lado
libre de ataduras, libre de temores.
Sé feliz a mi lado entre la lluvia
y el sol;
entre las noches de estrellas y
luna llena.
Abrázame dejando a un lado la
timidez,
bésame sintiendo mi cariño
pues te pertenece y es sólo tuyo
Ven, mi amor. Toma mi mano y nunca
me sueltes.
Que nuestro cariño secreto crezca
hasta el final de nuestros días.
Sobre esa música basura
Una tarde,
estaba haciendo fila en para pagar mis compras, cuando de los parlantes de
local pude oír el tema de reaguetón más vulgar que hasta ahora he tenido la
desgracia de percibir. Su letra era por demás patán, y lo que más me incomodó
es que había niños en las cercanías.
Sinceramente no
hay nada más repugnante que esa pseudo-música llamada reaguetón. Letras por
demás simplonas llenas de vulgaridades, hasta el extremo de que se ande
divulgando que su “música” sea considerada arte. ¿Acaso es artístico ese ritmo simplón, cuyas letras solo traten de sexismo, maltrato a la mujer y de situaciones
por lo demás baratas que ni siquiera tienen un gramo de erotismo?
Lo que escuché
esa tarde rebasó mi tolerancia a ese bodrio. Uno puede darse cuenta la
mentalidad que tienen quienes gustan de ese “ritmo”: son gente cuadrada,
machista, ignorante, se delatan fácilmente.
El reaguetón es
una lacra auditiva, que no tiene NADA de artístico ni de erótico. Sólo es una
porquería para gente con mentalidad de porquería.
“Dime lo que
escuchas y te diré qué cosmovisión tienes”.