Crónicas de mi Lado Oscuro

Dentro de los privilegios que existen dentro de mí círculo es la de receptar información clasificada de las integrantes de la Alianza.

Cada una de ellas, conforme surge el momento, recurren a mí para confiarme lo que a nadie más cuentan. Así es, parte de los privilegios que hay en mí círculo es escuchar sus secretos más ocultos, asuntos que nadie sabe, más que yo. Las escucho cual confesor, salvo que yo no juzgo, tampoco censuro ni condeno, pues de puritano no tengo ni un tanto.

Oigo sus asuntos y acciones de todo tipo:

- Croxus, sabes que... - dice la mujer de ojos expresivos.

- Mi querido demonio me ocurrió esto - dice la joven de gestos tiernos.

- Sólo tú lo sabes - afirma la mujer curiosa

- Contigo puedo ser franca - cuenta la chica de visión inconforme.

- Ayer me sucedió esto - narra la mujer de los largos viajes.

- Mi secreto está a salvo contigo - dice la dama oscura.

Toda confidencia que se expone es atesorada y guardada en mi memoria. Me halaga y me honra que acudan a mí para contarme lo que a nadie más se atreverían a relatar, a la par que les confío mis facetas por igual como en una simbiosis.

Soy un coleccionista de secretos.