Monday, December 18, 2006
DURMIENTE

Duermes en mis brazos. Tu rostro por un tiempo está libre de tribulaciones, está calmo, tal como lo tenias en tus años de niña. Pareces una escultura temporal sostenida por el sopor que infringe el sueño. Acaricio tu mejilla marcada por el torpe destino y tus finos labios de gatita coqueta. Es delicioso tenerte así ¿Sabes?. Desearía permanecer dormidos tu y yo hasta el acabose del tiempo lejos de este escenario hostil que tanto daño nos hace.
Pero el trolebús se detiene. Te despierto y salimos de la estación.
- Para mi sigues siendo hermosa – murmuro detrás de ti sin que llegues a notarlo.