Monday, July 24, 2006
Verano Invernal


Por un lado está el inclemente sol que hostiga la piel en todo el día, añadiendo el sudor ocasionado por el calor, que se pega en la ropa y pone nuestros cuerpos como embarrados en pegajosa azúcar.
El factor que tiene que ver con Mark Twain es el viento. Las brisas son tan fuertes que calan los huesos, al extremo de que la gente debe forrarse con los más gruesos sacos o quedarse calientitos en sus camas, los que no tienen que salir, claro. Los que no, deben aguantarse y exponerse a una gripe de proporciones polares, por más antigripales que uno tome.
He visto a gente deambular a pleno sol con abrigos y guantes de lana y no están locos, el viento de verano es mucho más gélido que el del invierno. En otras partes del mundo en cambio, la gente sufre de deshidratación con temperaturas que rozan los 40 grados centígrados, calor selvático, ropa ligera y sudor incesante.
No sé qué es lo peor, soportar esos 40 grados o los vientos de estas regiones. Sólo se que debo esperar a que el clima mejore, porque este verano es el más frío de mi vida.