Monday, January 16, 2006

 

La triste historia de Pablo.

Pablo era un joven espécimen que creció a duras penas, hasta llegar a la madurez sexual. Después de largos años de espera, sintió en su interior el llamado de la naturaleza.

Lo primero que hizo fue buscar un sitio donde vivir, un lugar adecuado para poder llevar a su pareja luego de cortejarla.

No fue nada fácil, los mejores lugares de la comuna estaban ya ocupados por rivales contemporáneos y mayores a él, quienes se encargaban de alejar al intruso a gritos y golpes.

Tras días de sufrir muchas afrentas, Pablo halló un estrecho lugar en la cima de una loma. Ahora debía dedicarse en buscar una pareja.

Frecuentó el lugar donde ellas solían reunirse, cerca de la playa. Trató de ser agradable y atractivo, pero no conseguía más de ellas que señales de rechazo y graznidos para que se alejara de ellas.

Pablo se sintió menospreciado, y hasta perplejo al ver que otros rivales, que eran muy semejantes a él conseguían cortejar a aquellas que le hicieron de lado.

En vano trataba de ganarse el afecto de alguna de ellas, quienes no hacían más intensificar su repudio contra él, al mismo tiempo que sus rivales se encargaban de golpearlo para demostrar lo inferior que era para ellos y toda la comuna.

Pasaron los meses. Pablo era el único de la comuna que no tenia pareja. Por lo menos podía buscar alimento y quedarse en su hogar sin ser molestado, pero el maldito llamado de la naturaleza no le dejaba tranquilo, hasta había momentos en que se sentía furioso y decepcionado consigo mismo.

Una tarde, Pablo caminaba cerca de la playa y vio a una joven descansando sobre una roca. Quiso saludarla, pero al hacerlo, su pretendiente apareció y se fue contra el pobre intruso. El celoso tipo lo golpeó y golpeó a la vista de muchos testigos que nada hicieron para detener la paliza. Pablo apenas pudo defenderse. Sintió que sus fuerzas se la iban de su interior. Suplicó piedad, pero el abusivo no oyó nada salvo el deseo de acabar con el joven indefenso. Tras varios minutos, Pablo se arrastró entre la lluvia de golpes hasta morir cerca de la orilla, ensangrentado y olvidado.

Moraleja: Si esto le pasó a un pobre Pingüino, ¿Qué se puede esperar de mi?

Nota: esta historia es 100% real, basada en un documental de la televisión alemana, transmitida en Telerama llamada: Los pingüinos de la zona de Magallanes: La historia de Pablo.

Comments:
ay carlitos...cuándo dejarás de sentir lástima por ti mismo? (moraleja) aunq suene así de feo, es lo que parece q expresas... tú ya sabes lo que pienso al respecto...
 
Creo que hay una gran diferencia entre pinguinos y "personas", vi el documental, es bueno, pero no le hallo relación con los seres humanos, nosotros tenemos mas recursos y mas cerebro que un pinguino
Saludos
 
>>nosotros tenemos mas recursos y mas cerebro que un pinguino

Ademas tenemos armas para matar a cualquier HDP q no te deje "seguir el mandato de la naturaleza".
 
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