Crónicas de mi Lado Oscuro

Una temporada a terminado, muy rápida cada vez. No es mi intención hacer un minucioso resumen de lo que fue esta fugaz entrega del Gran Morboso, tan solo relataré las más importantes.

Bueno, debo calificar la pasada temporada como relativa, 6.8 en mi escala del 10. cosas buenas sucedieron. Conocí mejor a mis amigas, en especial con Misty, con quien he compartido la mayor parte de el tiempo; la he conocido más y eso me gustó. Con CECI fui a cuenca en busca de la cruzada perdida, di clases en mi facultad, aprendí más del rock, compre cds, mangas, anime, y hasta un celular. CECI me compró ropa (y no modelé para ella por si las dudas), también estuve en lugares y situaciones agradables.

Lo malo, enfrentamientos con mi padre, la casi ruptura con Verónica, que está en un largo proceso de pacificación; el fracaso de la obra teatral por lo que no me pagaron lo acordado, mi resentimiento con Vladimir al prejuzgar a mi hija. También está la nada agradable pérdida de mí invicto. En verdad no entiendo que le ven de bueno.

Mis depresiones fueron muy intensas este año. 3 intentos de suicidio y una herida en mi antebrazo. Mis consejeras me advirtieron que no lo vuelva a hacer (yo y mi estúpido sentido del honor y de cumplir promesas). Mis conflictos internos estuvieron a la orden del día, así como mis cortocircuitos cerebrales.

Reconozco que me estoy haciendo amargado con el pasar de los años...

Haciendo un balance, 70% de cosas buenas me han pasado, 30% malas. No he conocido a un aliado/a potencial, así que mi lista de aliados es estable. En cuestiones de pareja, amarres, coqueteos, declaraciones, novias y todo eso 0,0,0(¿Por qué no me sorprende?), como el de cierto equipo de fútbol que está en el mundial y volverá sin pena ni gloria y que no quiero decir el nombre.

No quiero hacer promesas de político. Lo que espero de esta nueva temporada del Gran Morboso es tener mi valía en radio, ser un mejor rockero, publicar una de mis novelas raras, sacar mi primer manga, viajar y morir. Cada año que pasa para mi es un año menos al que pido a la muerte que me lleve...

Lo que menos quiero es ver a la gente que quiero sufrir, tomar un cargo público, que nada malo me ocurra ni a mis cercanos, tener pareja, volver a tener sexo; respecto a esto, debo ser más despreciativo con mis bajos instintos que me hacen ver en ridículo.

En fin, en esta nueva temporada mis ideales estarán nuevamente vigiladas por mi implacable aparato de control, a fin de que no caigan en alteraciones como en la temporada pasada. Habrá más mano de hierro sobre mi gobierno interno, más represión para conseguir mis objetivos según el guión que el Gran Morboso me dio e igualmente para aplastar cualquier intento de rebelión interna.

Veamos si las cosas que quiero se cumplen, o si me llega la muerte...