Wednesday, December 07, 2005
no digas nada

Estoy yaciendo al filo del final.
No siento mi cuerpo, salvo el frío
después de la batalla,
y tus lágrimas tibias
espoleando mi agonía,
deseando detener lo inevitable
Alcanzo tu mano,
me refugio en tu regazo;
la noche me envuelve,
te veo muy lejana
sin poder detener la pena
que te abruma.
Hice hasta lo último
por estar a tú lado,
en la ventura
y en los días adversos.
Mí corazón se detiene,
me besas por última vez,
el ocaso nos separa
ya debo descansar.
No digas nada
mientras lloro en tus brazos.
No digas nada
mientras escucho tus latidos.
Tan sólo te pido en un murmullo
no me sueltes,
y abrázame.
No siento mi cuerpo, salvo el frío
después de la batalla,
y tus lágrimas tibias
espoleando mi agonía,
deseando detener lo inevitable
Alcanzo tu mano,
me refugio en tu regazo;
la noche me envuelve,
te veo muy lejana
sin poder detener la pena
que te abruma.
Hice hasta lo último
por estar a tú lado,
en la ventura
y en los días adversos.
Mí corazón se detiene,
me besas por última vez,
el ocaso nos separa
ya debo descansar.
No digas nada
mientras lloro en tus brazos.
No digas nada
mientras escucho tus latidos.
Tan sólo te pido en un murmullo
no me sueltes,
y abrázame.