Thursday, April 28, 2016
Décima Conmemoración. A-28
Diez años han pasado desde aquella noche en que fue el inicio de mi gran
caída interna. No lo considero un motivo sino no como reflexión de lo ocurrido
ese día.
Viendo retrospectivamente, por un lado, las cosas tuvieron que darse
por capricho del destino, pasaba por muchos conflictos y en esa desesperación
expuse mis sentimientos a alguien, misma que los rechazó de tal modo que
destruyó lo último de afecto que tenía… sacrifiqué una amistad, sacrifiqué mi
orgullo.
Este no es el momento de señalar culpables, ni saber quién estuvo en lo
cierto y quién no. Solo puedo decir que de esos dolorosos tiempos obtuve mi renacimiento;
hasta ahora no sé cómo hice para sobrevivir a eso, tal vez fue la ira o algún
otro factor que me hizo evadir de mi muerte. De esas ruinas resurgí, dejando al
otro yo sin vida perdido en los escombros. Desde ese momento dejé de ser el
mismo. Aquel sacrificio me reveló cosas que me hicieron más fuerte.
A decir verdad, me he vuelto más fuerte, pero a la vez frío, orgulloso y
desconfiado. Me he vuelto duro con el
paso de los años; no he vuelto a exponer mis emociones a ninguna mujer porque me
prometí no volver a dejar que mi orgullo sea herido de nuevo.
Yukino me dijo una vez que debería darme una oportunidad y olvidar lo
ocurrido, pero ¿cómo alguien puede dejar atrás algo que quedó tan marcado en su
ser? Equivaldría a decir a una víctima del 911 que lo deje de lado y haga de
cuenta que nunca ocurrió. Simplemente no se puede.
Yo no suelo recordar esos eventos para hacerme daño, y si lo hago es
para recordarme que no debo cometer ese error, porque el orgullo está por
encima de todo. No le guardo rencor a esa persona, siento indiferencia, como
alguien que se marchó para no volver jamás.
No pienso involucrarme afectivamente con ninguna mujer, porque lo
prometí, porque ya ha pasado mucho tiempo y ya no estoy para esos juegos, y además
porque admito que soy un filofóbico.
Este día conmemorativo para mí es un momento de luto y la vez un momento
para reforzar mis principios y promesas.